“No es nada personal, pero me
siento tan confundido”
Es muy extraña la vida, un día te
encuentras pensando en lo que has vivido si esa persona especial, lo bueno, lo
malo, aquello que sufriste en su presencia o en su ausencia, te encuentras en
la cuerda floja entre la risa y la indiferencia. Dice un dicho popular “Santo
que no es visto, no es adorado” pero hay personas que aunque su presencia no es
primordial, tienden a existir en nuestras vidas, son aquellas que nos marcan de
forma brutal.
Seguí caminando, deje que el
reloj siguiera y envejecí, al igual que tú, no fue mi deseo voltear hacia atrás
(ese es un pensamiento que si lo traducimos es dar una oportunidad al tiempo de
sanar). Creo que cuando de manera indirecta una persona te busca es porque no
lograron ir a la conquista de su mundo, rara veces (hablo de manera personal)
regreso por voluntad propia a la vida de quienes les dije adiós, mi opinión
(repito “personal”) es que si cerraste una puerta, es para siempre, pero hay quienes
quieren regresar por varias razones, obviamente no me pondré a enumerarlas, lo
que sí puedo decir es que “ese acercamiento” es paulatino, despacio, adaptativo
y cuidadoso.
Hoy podría decir que en este
momento si hay una persona que está haciendo esto, no sé si merezca regresar,
si realmente cambio o solo es un capricho. Veo el reflejo de lo que paso, deben
de entender que las personas cambian constantemente, pese que jamás la busque,
fue esa persona la que volvió. Puede ser que ella tenga pareja o no pero en
ambos casos respetar es lo primordial, los deseos, sus deseos, entender que
nuestros caminos se están separando.
Después de que te has dado
madrazos y te han cortado las alas, se
teme a ser un confusión, yo no quiero eso en mi vida ¿Ustedes si? Cuando juegan
contigo empiezas a desconfiar del amor
¿Cómo confiar en personas que dejaron que te ilusionarás? Si es en esta
pregunta en la que hay que aceptar que tenemos la culpa por no tener en claro
la situación y por no querer ver la realidad te dices a ti mismo: ¡Le gusto!
¡Me quiere! ¡Tengo una oportunidad!
¡Carajo! Reacciona, te mientes,
es eso, nos mentimos, nos ilusionamos y terminamos creyendo que es cierto. Y
después de darte el trancazo, reaccionas haciéndote la víctima, ósea ¿No puedes
asumir la responsabilidad de haberte ilusionado estúpidamente? Este no es en
todos los casos, en ocasiones la otra persona se confunde y termina destruyendo
a la otra persona, aquí creo que la culpa es compartida, pero el lastimado es
quien acepta el juego. Inmadurez emocional de las dos partes, dos necesitados
que se encuentran de frente y por sus pantalones están juntos.
Tratar de mantener tu línea de
aquellas que te lastimaron y que les permitiste esto es muy confuso, sobre todo
cuando hay alguien que te roba la sonrisa cuando la vez o la escuchas ¿Le
dejarías entrar a alguien que el daño que te hizo fue porque tu se lo
permitiste? Esa es buena pregunta, sobre todo cuando también tuviste la
responsabilidad de lo que paso.